Consuegra

Iba a ser un largo día por lo que levantó temprano listos para un inicio rápido y como de costumbre mi primer trabajo fue comprobar las condiciones meteorológicas. El aire se sintió más fresco y desde la ventana del hotel pude ver nubes hacia el este, que fue un poco de una preocupación, pero la dama en el desayuno español televisión parecía convencido de que iba a ser fino y Cabo Oeste era azul claro y fue la dirección en la que nos estábamos partida. Después de desayuno y desprotección lleno el coche y comenzaron en la unidad de ciento cincuenta kilómetros a Toledo.

Nos llevó primero a la ciudad de Alcázar de San Juan, pero esto no era causa de cualquier tipo de investigación sólo un instinto que sería interesante basado en lo que parecía ser un nombre prometedor. Yo debo han llevado a cabo algunas investigaciones porque no parece muy atractiva a todos, no hubo un castillo a verse las nubes habían nos atrapados y superado a nosotros y hubo una blanqueada tipo de blancura calcárea al cielo por lo que hicimos sin parar. En algún lugar justo que al oeste de la ciudad nos cruzó la vieja carretera A4 y recordó a mí de la unidad de loca a través de España con mi hermano y a dos amigos en 1984 cuando nos condujo desde el sur de Portugal hasta la frontera con Francia en treinta y seis horas en un clapped con Ford Escort.

En el hotel había fotos de un castillo y una fila de molinos de viento en la ciudad próxima de Consuegra así como sucedió en la vista nos dejó la carretera principal y se dirigió hacia la cima de la colina donde se encontraba con vistas a la ciudad. Desde abajo, el castillo espera magnífico pero en estrecha inspección era también en un poco de mal estado lo siento pero desde aquí hubo opiniones estupendos sobre la gran llanura de Castilla y es fácil ver por qué esto fue una vez un lugar muy importante de militar que había vigilado la ruta directa desde el sur a Toledo y Madrid. El castillo fue una vez un baluarte de los Caballeros de San Juan, la rama española de los hospitalarios de Caballero de la orden de San Juan de Jerusalén.

Así como el castillo de Consuegra es famoso por sus molinos de viento que permanecieron en uso hasta el comienzo de la década de 1980. Ellos fueron construidos originalmente por los caballeros y eran utilizados para moler el grano que crecía en la llanura y se transmite a través de las generaciones de molineros de padres a hijos. Los once molinos de viento de Consuegra son algunos de los mejores ejemplos de molinos de viento españolas en Castilla-La Mancha y a pesar de que era un poco frío en la parte superior de la colina es un buen momento para verlos porque habían muy pocos visitantes esto temprano en la mañana.

Después de dejar Consuegra nos se reincorporó a la carretera y se dirigió hacia el norte a Toledo y en el camino se evaporación las nubes y el sol se vierte a través y pasamos más castillos en mora y en Almonacid pero no dejamos de nuevo. El escenario comenzó a cambiar demasiado y se convirtió en más sucio y mano como dejamos los campos utilizó y sus colores encantadoras detrás. Justo antes de Mediodía llegamos a las afueras de Toledo y en la parte superior de la ciudad pudimos ver la Catedral y el Alcázar y hemos seguido los signos del centro histórico y encontró un aparcamiento muy amplio y cómodo en el borde de la ciudad y en mi tabla de la Liga de la ciudad española aparcamientos que Toledo fue directo a la parte superior. En la parte inferior de la forma sigue siendo Sevilla!

Podría haber sido justo en el borde de la ciudad pero al involucrarse allí una subida bastante agotadora para alcanzarlo porque Toledo está construida en la cima de un escarpado afloramiento de roca que, en la edad media, hecho fuerzas inexpugnables para hostiles. Toda la ciudad es una especie de Castillo natural con un foso, el río Tajo, que se ejecutan en un bucle garganta alrededor de tres lados de la misma. La única manera que podría considerar un enemigo era atacar el lado norte y que fue difícil debido a era la parte más fuertemente fortificada de las murallas de la ciudad. El Tajo es el cuarto río más largo en Europa occidental y el más importante en la Península Ibérica y de Toledo que fluye hacia el Océano Atlántico en Lisboa en Portugal.

La Mancha, Don Quijote y molinos de viento

Después de un par de horas a regañadientes dejamos la ciudad poco atractivo de Chinchón, con su hermoso bronceaba cuadrados en el sol de la tarde y después de subprocesamiento nuestro camino a través de las estrechas calles dos veces por algún trazo milagroso de la buena fortuna que encontramos en el camino correcto y hacia el sur a la ciudad de Belmonte, en la provincia de Cuenca, donde estábamos debido a permanecer por tres noches. Después de un corto, mientras que el escenario comenzó a cambiar y se convirtió en mucho más plana pero todavía con olivos y viñedos y campos de colores pastel bastante y en algún momento nos pasó fuera de la región de Madrid y en Castilla-La Mancha y estuvimos en la tierra de Don Quijote y Sancho Panza pero fueron de los primeros molinos de viento que vimos poco después de llegar no el maíz encantador rectificado molinos de Cervantes pero turbinas eólicas modernas en su lugar.

Fue un centenar de kilómetros a Belmonte y la carretera que pasa a través de varias aldeas y fue ocupado, lleno de camiones y muy lento. El navegador se quedó dormido y quedé frustrado por la falta de progreso y cuando la oportunidad presentó izquierda la carretera regional y se unió a la autopista en su lugar. Esto era mucho más fácil, porque para muchos españoles, conducir en las autopistas es demasiado caro y la densidad de tráfico es glorioso baja. Esto es en contraste con las principales carreteras de tronco funcionando en paralelo a las autopistas, que son atascadas por conductores que son reacios, o simplemente no pueden permitirse, para pagar los peajes de la autopista elevada. Las autopistas de peaje en España son un lujo para los ricos y los altos cargos desalientan la mayoría españoles, especialmente de camioneros, de utilizarlos y añadir a la congestión irritante en otras carreteras.

Dos uniones de la autopista costo €5,20 pero valió la pena y nos dejó en Mota del Cuerva quince kilómetros de Belmonte. Hasta el momento que habíamos hecho nunca tan bien pero con el navegador aún desorientado y soñoliento esto era donde logró se confunden y perdió por primera vez y tenía a doble vuelta y hacer varios desvíos antes de emerger en el lado derecho de la ciudad al lado de una colina con una fila de molinos de viento Castellanos encaladas. Se detuvo para ver y tomar fotografías y visitamos el pequeño museo y admirar las vistas sobre las planicies a ambos lados de la cresta elevada por encima de la ciudad.

Dejando los molinos de viento nos condujo a Belmonte y llegó a aproximadamente las seis en un pequeño pueblo curiosamente tranquilo y desierto. Después de un poco de incertidumbre se encuentra el hotel Palacio Buenavista Hospedestra y archivada. Fue uno de los ‘ he hice la elección correcta ‘ momentos que a veces puede obtener a su llegada, pero resultó para ser una encantadora y la nuestra fue una gran sala con muebles tradicionales, un piso de mosaico rojo y una buena vista sobre el jardín del hotel y la Iglesia de al lado. Rápidamente pasado el momento de duda y salió para encontrar una tienda para una botella de vino de la parte superior de tornillo y algunos cerveza. Esto tomó algún hallazgo pero finalmente llegué a través de un minimarket escondido por una calle lateral y las compras se hicieron. Fue un pueblo agradable y tengo que decir que tengo una preferencia para Hoteles en ciudades más pequeñas, en lugar de permanecer en las grandes ciudades, porque en general son casi siempre más barato y más fácil de utilizar!

Más tarde nos salieron a buscar un lugar donde comer pero se trata de un pequeño lugar soñoliento y no hubo mucho para hacerlo hemos encontrado un bar local y fue dentro de una bebida. Hubo algunos clientes locales reunidos en torno a la barra y una familia en una tabla adyacente. Hubo una señal en la pared que dice «no fumar de está permitido» pero fue junto a una máquina de cigarrillos y la regla, evidentemente, no aplica aquí porque el aire era grueso con humo Acre. Legislación antitabaco se convirtió en ley en España en ^st de 1 de enero de 2006, pero para pequeños bares y restaurantes que la legislación ofrece el propietario la elección libre de humo de ir o no, pero si no lo significa que los clientes menores de dieciocho años de edad están permitidos en ese bar. Este Reglamento fue siendo flagrantemente ignorado así. En comparación con otros países europeos, donde el hábito de fumar en el lugar de trabajo está prohibida totalmente, la legislación española es débil y confuso, y se estima que fumar continúa en el 90% de todas las pequeñas barras españolas.

Es una especie muy tradicional del lugar donde los clientes tenían ese curioso hábito español de arrojar sus desechos en el piso debajo de la barra donde hubo una colección de artículos, extremos de cigarrillos y otros residuos que hizo el lugar parece más sucio. Imagine hacerlo en el bar de la aldea y se le pedirá que dejar estoy seguro! No eran que utiliza o bien a los turistas extranjeros y la niña con la familia mantuvo superando acercamiento hacia nosotros impulsado en por curiosidad, pero mantuvo una distancia segura sólo en caso de que éramos visitantes de otro planeta, y supongo que, para ella, tan bien podríamos haber sido.

Con comer opciones en la ciudad seriamente limitada (es decir, inexistente) nos regresó al hotel y disfrutó de una simple pero agradable comida en el restaurante junto con una botella de vino local y, a continuación, después de un comienzo temprano y un largo día volvió a la sala y sueño una buena noche de.